La ROE en la FM Comunitaria
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Novato
Si Ud. aún desconoce este término, es preferible que saltee este artículo y continúe leyendo el resto de los interesantes asuntos que tratamos en esta sección, no estamos en tiempos en que sea necesario agregar nuevas preocupaciones a las que ya tendrá por obra y gracia de la realidad y los noticieros. De todos modos consérvelo a mano, por si acaso...
Si Ud. aún desconoce este término, es preferible que saltee este artículo y continúe leyendo el resto de los interesantes asuntos que tratamos en esta sección, no estamos en tiempos en que sea necesario agregar nuevas preocupaciones a las que ya tendrá por obra y gracia de la realidad y los noticieros. De todos modos consérvelo a mano, por si acaso...
La R.O.E. (femenino) es una abreviatura de: Relación de Ondas Estacionarias, ¿no le dice nada verdad?, lo que si dice es la cara del técnico cuando le informa que su antena tiene "eso". Toda clase de males augura la siniestra abreviatura, desde interferencias en TV hasta la total y definitiva destrucción de su preciado equipo trasmisor. Ella, para peor, siempre viene acompañada con su simbiótico cómplice "La Potencia Reflejada", que en realidad es una especie de sinónimo de impotencia (con todas sus implicaciones sicológicas, claro).
Luego de que el técnico diagnostica "ese mal" el mundo deja de ser el mismo. Oscuros nubarrones se ciernen sobre su estación y, dado que aún no se ha establecido quién pudiera ser el dios de la tecnología, es imposible saber cuál es el sacrificio correcto para calmar su sed...
Algunos consejos para conjurar el mal.
El primero, como siempre, es comprender de qué se está hablando, tarea no tan sencilla a juzgar por lo que se ve en algunos programas de opinión política. Pues bien, nada hay de misterioso en la R.O.E. simplemente es una medida de cuánto se ajusta la antena a su línea de trasmisión, si "emparejan bien"...
Pero ¿qué es "emparejar bien"?, ¿pertenecer a sexos opuestos? ¿al mismo partido?. Nada de eso, es tener una propiedad que se llama "Impedancia" similar. Supongamos que se tiene un cable coaxil de 50 Ohms y que la antena tiene 51 Ohms; ¿está bien o mal? ¿y si la diferencia es 50 a 60?. Cómo se responda a esta clase de pregunta es el meollo del asunto. Aquí es donde encontrará toda clase de opiniones y gualichos. Desde ya le vaticino que difícilmente coincidan entre ellas, para su mayor tribulación. Tampoco faltará quien le asegure que el autor de este artículo "no-sabe-nada", seguramente no esté muy lejos de la verdad...
Separando la paja del trigo
¿El alcance de su emisora está determinado por la R.O.E.?
No necesariamente, eso depende del tipo de sistema de adaptación de su amplificador a la línea de trasmisión y de las pérdidas propias de la misma. Algunos equipos, especialmente los valvulares, disponen de algún medio para ajustar su salida y adaptarse correctamente a una línea de trasmisión con R.O.E. Los equipos transistorizados, generalmente no, pero pueden incorporar un dispositivo denominado "transmatch" que puede hacer esa tarea perfectamente.
Cuando la línea tiene pérdidas importantes (y eso no es bueno), las mismas se acentúan en presencia de ondas estacionarias, pero en general no demasiado, por ejemplo:
Un cable coaxil rígido de 1/2 pulgada de 50 m de longitud tendrá una pérdida de potencia de aproximadamente 1,2 dB estando perfectamente adaptado a la antena, si consideráramos una R.O.E. de 2:1, la pérdida sería de aproximadamente 0,2 dB adicionales, si la R.O.E. fuera de 3:1 la pérdida adicional sería de 0,5 dB. Como se ve no son números que afecten seriamente la performance efectiva de la estación. Claro que si un sistema que antes tenía 1,5:1 pasa a tener 10:1, lo mas probable es que se le haya volado la antena, ¿me explico?
¿Y la potencia reflejada?
La R.O.E. es una forma de indicar una desadaptación, útil para un ingeniero que está realizando complicados cálculos matemáticos, pero no tanto para el usuario. Para el caso es como los grados SAE de un lubricante o el número octano de una nafta, no sabemos bien que cosa sean aunque "nos den una idea". Algo semejante sucede con lo que se denomina "Potencia Reflejada", si bien el concepto parece simple no aporta información muy útil al usuario porque es mucho más complejo de lo que representa a primera vista. Desgraciadamente muchos técnicos no tienen bien claro este asunto tampoco, con lo que el tema se complica bastante para el radiodifusor comunitario. Diremos tan solo lo siguiente:
La potencia reflejada, no es potencia desperdiciada. Es tan solo lo que indica un instrumento llamado "Wattímetro direccional" en una de sus lecturas parciales. Un cierto sistema hipotético podría muy bien indicar, por ejemplo, una potencia directa de 100 W y una potencia reflejada de 90 W. El lego podría suponer que se están desperdiciando 90 W, mientras el ingeniero que desarrolló tal sistema sabría que el mismo está funcionando perfectamente sin ningún desperdicio. ¿Extraño?, puede parecerlo, y sin embargo es absolutamente un ejemplo correcto que ilustra la idea de que el tema se las trae...
¿Puede la R.O.E. producir interferencias en TV u otros equipos radioeléctricos?
Definitivamente NO. La R.O.E. en si no puede generar ningún tipo de interferencia. Las interferencias siempre son resultado de alguna inestabilidad o defecto del equipo trasmisor (o del receptor). Si se presentan cuando la R.O.E. es elevada eso es harina de otra bolsa. Un buen equipo debería ser incondicionalmente estable o, al menos, tolerar cierta desadaptación sin producir emisiones espúreas y, si no es generoso en este aspecto, tenga por seguro que no es un buen diseño. Punto.
¿Puede la R.O.E. dañar los equipos?
Si, puede hacerlo. Los equipos que no poseen ningún tipo de circuito de ajuste de adaptación a la línea, se diseñan, habitualmente, para una impedancia de carga de 50 Ohms. Eso es común en los transistorizados. La línea, en presencia de R.O.E. presenta al equipo una impedancia que difiere de la de diseño y en estas condiciones el equipo puede dañarse gravemente. Un buen equipo debería ser tolerante en este aspecto y disponer de algún margen de seguridad.
Un aparato que solo es capaz de operar sin dañarse o apagarse en una línea perfectamente adaptada es un equipo que se halla en el límite de sus posibilidades, es como una cuerda tensada al borde de la rotura, un par de kilos más y se cortará. Esta es, desde luego, materia opinable y de preferencias (también de bolsillo), después de todo es común que un motor de carreras sea forzado cerca del límite de la capacidad de sus metales y lubricantes. No podemos decir que un trasmisor en estas condiciones sea "malo", pues el mismo equipo operando a menor potencia pudiera ser confiable y seguro, al igual que la cuerda de nuestro ejemplo. Si Ud. es consciente de la situación y los riesgos que la misma representa, está todo OK...
¿Cuánta R.O.E. puedo tolerar?
Decíamos que lo ideal sería que un equipo tenga cierto margen para tolerar ondas estacionarias sin dañarse. Un valor comúnmente aceptado es que tolere al menos una R.O.E. de 1,5:1, lo que representa una potencia reflejada de aproximadamente un 4%. Es común encontrar equipos que toleran bien una R.O.E. del orden de 2:1 que representa aproximadamente un 11% de potencia reflejada. De hecho las condiciones meteorológicas a que están sometidas la antenas normales hacen que mantener una adaptación perfecta en el tiempo no sea fácil sin un relativamente costoso mantenimiento frecuente, eso sin contar que la mayoría de las antenas en el mercado se entregan preajustadas en fábrica en condiciones diferentes a la del emplazamiento definitivo y que, a menudo en el mismo no se dispone de personal competente para efectuar un ajuste fino.
Otro factor es la calidad del cable coaxil. Un buen fabricante de cable (por ej. Cellflex), nos dice en su hoja de datos que el mismo puede tener hasta 1,22:1 de R.O.E. (que representa una potencia reflejada de aproximadamente 1%), ¡nuevo, de fábrica!. Supongamos una excelente antena que nos garantice idéntica especificación.
La teoría de errores nos enseña que en una combinación de este tipo debemos esperar al menos una R.O.E del orden de 1,3:1 o 2% de potencia reflejada en una línea corta o de bajas pérdidas. Entonces como límite inferior podemos decir que este valor ya es la excelencia pura, por ende hasta el peor equipo debe poder aceptar este 2%, ¡sin protestar!...
De aquí en adelante el margen de seguridad que Ud. debe exigir al equipo es su propia opción, diría que en estos tiempos de dura competencia, la mayoría de los fabricantes se rehusarán a darle garantía por relaciones de ondas estacionarias superiores a 2:1. Si yo fuera Ud. no aceptaría algo que no me perdonara un 1,5:1 (4%)...
¿Y qué hay de los circuitos de protección?
Podemos dividirlos en dos clases principales:
Aquellos que sacan de servicio al equipo cuando se activan.
Aquellos que disminuyen la potencia del mismo para mantenerla en niveles seguros.
El primero es el menos recomendable (y el más usual en equipos de bajo precio) por razones obvias. ¡Ud. se queda sin radio (o sin amplificador) hasta que el técnico solucione el inconveniente!
El segundo es mucho más conveniente por su flexibilidad y tolerancia, de hecho algunos no sacarán de servicio al equipo jamás por una desadaptación de la antena, y la tentación de no arreglar el sistema hasta que ya no sale casi nada al aire puede volverlo en su contra ¿O no...?
Si Ud. aún desconoce este término, es preferible que saltee este artículo y continúe leyendo el resto de los interesantes asuntos que tratamos en esta sección, no estamos en tiempos en que sea necesario agregar nuevas preocupaciones a las que ya tendrá por obra y gracia de la realidad y los noticieros. De todos modos consérvelo a mano, por si acaso...
La R.O.E. (femenino) es una abreviatura de: Relación de Ondas Estacionarias, ¿no le dice nada verdad?, lo que si dice es la cara del técnico cuando le informa que su antena tiene "eso". Toda clase de males augura la siniestra abreviatura, desde interferencias en TV hasta la total y definitiva destrucción de su preciado equipo trasmisor. Ella, para peor, siempre viene acompañada con su simbiótico cómplice "La Potencia Reflejada", que en realidad es una especie de sinónimo de impotencia (con todas sus implicaciones sicológicas, claro).
Luego de que el técnico diagnostica "ese mal" el mundo deja de ser el mismo. Oscuros nubarrones se ciernen sobre su estación y, dado que aún no se ha establecido quién pudiera ser el dios de la tecnología, es imposible saber cuál es el sacrificio correcto para calmar su sed...
Algunos consejos para conjurar el mal.
El primero, como siempre, es comprender de qué se está hablando, tarea no tan sencilla a juzgar por lo que se ve en algunos programas de opinión política. Pues bien, nada hay de misterioso en la R.O.E. simplemente es una medida de cuánto se ajusta la antena a su línea de trasmisión, si "emparejan bien"...
Pero ¿qué es "emparejar bien"?, ¿pertenecer a sexos opuestos? ¿al mismo partido?. Nada de eso, es tener una propiedad que se llama "Impedancia" similar. Supongamos que se tiene un cable coaxil de 50 Ohms y que la antena tiene 51 Ohms; ¿está bien o mal? ¿y si la diferencia es 50 a 60?. Cómo se responda a esta clase de pregunta es el meollo del asunto. Aquí es donde encontrará toda clase de opiniones y gualichos. Desde ya le vaticino que difícilmente coincidan entre ellas, para su mayor tribulación. Tampoco faltará quien le asegure que el autor de este artículo "no-sabe-nada", seguramente no esté muy lejos de la verdad...
Separando la paja del trigo
¿El alcance de su emisora está determinado por la R.O.E.?
No necesariamente, eso depende del tipo de sistema de adaptación de su amplificador a la línea de trasmisión y de las pérdidas propias de la misma. Algunos equipos, especialmente los valvulares, disponen de algún medio para ajustar su salida y adaptarse correctamente a una línea de trasmisión con R.O.E. Los equipos transistorizados, generalmente no, pero pueden incorporar un dispositivo denominado "transmatch" que puede hacer esa tarea perfectamente.
Cuando la línea tiene pérdidas importantes (y eso no es bueno), las mismas se acentúan en presencia de ondas estacionarias, pero en general no demasiado, por ejemplo:
Un cable coaxil rígido de 1/2 pulgada de 50 m de longitud tendrá una pérdida de potencia de aproximadamente 1,2 dB estando perfectamente adaptado a la antena, si consideráramos una R.O.E. de 2:1, la pérdida sería de aproximadamente 0,2 dB adicionales, si la R.O.E. fuera de 3:1 la pérdida adicional sería de 0,5 dB. Como se ve no son números que afecten seriamente la performance efectiva de la estación. Claro que si un sistema que antes tenía 1,5:1 pasa a tener 10:1, lo mas probable es que se le haya volado la antena, ¿me explico?
¿Y la potencia reflejada?
La R.O.E. es una forma de indicar una desadaptación, útil para un ingeniero que está realizando complicados cálculos matemáticos, pero no tanto para el usuario. Para el caso es como los grados SAE de un lubricante o el número octano de una nafta, no sabemos bien que cosa sean aunque "nos den una idea". Algo semejante sucede con lo que se denomina "Potencia Reflejada", si bien el concepto parece simple no aporta información muy útil al usuario porque es mucho más complejo de lo que representa a primera vista. Desgraciadamente muchos técnicos no tienen bien claro este asunto tampoco, con lo que el tema se complica bastante para el radiodifusor comunitario. Diremos tan solo lo siguiente:
La potencia reflejada, no es potencia desperdiciada. Es tan solo lo que indica un instrumento llamado "Wattímetro direccional" en una de sus lecturas parciales. Un cierto sistema hipotético podría muy bien indicar, por ejemplo, una potencia directa de 100 W y una potencia reflejada de 90 W. El lego podría suponer que se están desperdiciando 90 W, mientras el ingeniero que desarrolló tal sistema sabría que el mismo está funcionando perfectamente sin ningún desperdicio. ¿Extraño?, puede parecerlo, y sin embargo es absolutamente un ejemplo correcto que ilustra la idea de que el tema se las trae...
¿Puede la R.O.E. producir interferencias en TV u otros equipos radioeléctricos?
Definitivamente NO. La R.O.E. en si no puede generar ningún tipo de interferencia. Las interferencias siempre son resultado de alguna inestabilidad o defecto del equipo trasmisor (o del receptor). Si se presentan cuando la R.O.E. es elevada eso es harina de otra bolsa. Un buen equipo debería ser incondicionalmente estable o, al menos, tolerar cierta desadaptación sin producir emisiones espúreas y, si no es generoso en este aspecto, tenga por seguro que no es un buen diseño. Punto.
¿Puede la R.O.E. dañar los equipos?
Si, puede hacerlo. Los equipos que no poseen ningún tipo de circuito de ajuste de adaptación a la línea, se diseñan, habitualmente, para una impedancia de carga de 50 Ohms. Eso es común en los transistorizados. La línea, en presencia de R.O.E. presenta al equipo una impedancia que difiere de la de diseño y en estas condiciones el equipo puede dañarse gravemente. Un buen equipo debería ser tolerante en este aspecto y disponer de algún margen de seguridad.
Un aparato que solo es capaz de operar sin dañarse o apagarse en una línea perfectamente adaptada es un equipo que se halla en el límite de sus posibilidades, es como una cuerda tensada al borde de la rotura, un par de kilos más y se cortará. Esta es, desde luego, materia opinable y de preferencias (también de bolsillo), después de todo es común que un motor de carreras sea forzado cerca del límite de la capacidad de sus metales y lubricantes. No podemos decir que un trasmisor en estas condiciones sea "malo", pues el mismo equipo operando a menor potencia pudiera ser confiable y seguro, al igual que la cuerda de nuestro ejemplo. Si Ud. es consciente de la situación y los riesgos que la misma representa, está todo OK...
¿Cuánta R.O.E. puedo tolerar?
Decíamos que lo ideal sería que un equipo tenga cierto margen para tolerar ondas estacionarias sin dañarse. Un valor comúnmente aceptado es que tolere al menos una R.O.E. de 1,5:1, lo que representa una potencia reflejada de aproximadamente un 4%. Es común encontrar equipos que toleran bien una R.O.E. del orden de 2:1 que representa aproximadamente un 11% de potencia reflejada. De hecho las condiciones meteorológicas a que están sometidas la antenas normales hacen que mantener una adaptación perfecta en el tiempo no sea fácil sin un relativamente costoso mantenimiento frecuente, eso sin contar que la mayoría de las antenas en el mercado se entregan preajustadas en fábrica en condiciones diferentes a la del emplazamiento definitivo y que, a menudo en el mismo no se dispone de personal competente para efectuar un ajuste fino.
Otro factor es la calidad del cable coaxil. Un buen fabricante de cable (por ej. Cellflex), nos dice en su hoja de datos que el mismo puede tener hasta 1,22:1 de R.O.E. (que representa una potencia reflejada de aproximadamente 1%), ¡nuevo, de fábrica!. Supongamos una excelente antena que nos garantice idéntica especificación.
La teoría de errores nos enseña que en una combinación de este tipo debemos esperar al menos una R.O.E del orden de 1,3:1 o 2% de potencia reflejada en una línea corta o de bajas pérdidas. Entonces como límite inferior podemos decir que este valor ya es la excelencia pura, por ende hasta el peor equipo debe poder aceptar este 2%, ¡sin protestar!...
De aquí en adelante el margen de seguridad que Ud. debe exigir al equipo es su propia opción, diría que en estos tiempos de dura competencia, la mayoría de los fabricantes se rehusarán a darle garantía por relaciones de ondas estacionarias superiores a 2:1. Si yo fuera Ud. no aceptaría algo que no me perdonara un 1,5:1 (4%)...
¿Y qué hay de los circuitos de protección?
Podemos dividirlos en dos clases principales:
Aquellos que sacan de servicio al equipo cuando se activan.
Aquellos que disminuyen la potencia del mismo para mantenerla en niveles seguros.
El primero es el menos recomendable (y el más usual en equipos de bajo precio) por razones obvias. ¡Ud. se queda sin radio (o sin amplificador) hasta que el técnico solucione el inconveniente!
El segundo es mucho más conveniente por su flexibilidad y tolerancia, de hecho algunos no sacarán de servicio al equipo jamás por una desadaptación de la antena, y la tentación de no arreglar el sistema hasta que ya no sale casi nada al aire puede volverlo en su contra ¿O no...?
Puntos: Sin Puntos - Opsss: Para dar puntos debes estar conectado... - Post Publicado hace 10 años
